Ha llegado a nuestras manos el balanze de Incendios forestales en Castilla y León, en el período de Enero a Marzo de este mismo año. Las cifras son desoladoras. Son unos meses marcados por la alta intencionalidad y siniestralidad.
El Operativo contra Incendios Forestales de Castilla y León actuó en 878 siniestros durante el primer trimestre del año, tres meses que se caracterizaron por períodos de lluvias y nieves alternando con momentos anticiclónicos muy secos y de elevadas temperaturas.
La alta siniestralidad estuvo motivada por estas elevadas temperaturas, la baja humedad relativa provocada por la ausencia de lluvias y el elevado índice de intencionalidad, especialmente en las provincias de León y Zamora, con un 90% de casos intencionados, señala un comunicado. Al respecto, desde la Junta remarcaron la alta tasa de intencionalidad de los incendios de este período, con elevada simultaneidad de focos, lo que dificultó notablemente la extinción.
En este sentido, desde la Consejería de Medio Ambiente se hizo un llamamiento a la población para que se abstenga totalmente del empleo del fuego y solicitó a la Delegación del Gobierno y a la Guardia Civil un sobreesfuerzo para tratar de controlar el índice de intencionalidad.
La Junta concretó que entre enero y marzo de 2009, registraron dos períodos de anticiclón, el primero abarcó la segunda quincena de febrero y otro mas prolongado que comenzó la segunda quincena de marzo y que afectó especialmente a la mitad oeste de la Comunidad.
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